29 de abril de 2023

Mtra. Laura Molina Pérez, subdirectora de Educación Inicial

Definir el momento de ingreso de un hijo, por primera vez, a un centro educativo es una decisión que demanda tiempo y dedicación. Amalgamar la crianza en familia con la crianza compartida involucra cambios, interrogantes y esfuerzo en el núcleo familiar. 

Al decir de la pedgaoga Laura Pitluk, esta inestabilidad que se genera en la familia conlleva dudas y temores que son necesarios y saludables para el crecimiento del niño y del grupo familiar. Supone cambios de la situación anterior y la integración de nuevas miradas. 

Como institución educativa, desde la primera entrevista de consulta, acompañamos y sostenemos este momento. El conocimiento previo (a partir de datos que aporta la familia luego de confirmar la inscripción y los que surgen de las entrevistas anteriores al inicio de las clases) nos permite articular con naturalidad nuestras propuestas con las familias y por ende, educar en colaboración. 

Entendemos el cuidado como acción pedagógica y, a su vez, imprimimos intencionalidad pedagógica a los acontecimientos y relaciones cotidianas. Cada nuevo comienzo es un año pleno de posibilidades y nuevas experiencias por vivir; el gran desafío, entonces, es conocer y conocerse para confiar. En consonancia con Pitluk, afirmamos que esto implica que cada docente y otros integrantes de la comunidad educativa se informen, conozcan y comprendan el ambiente inmediato de los niños desde una perspectiva pedagógica. 

Por otra parte, la interacción y participación de las familias es uno de los propósitos de nuestra Institución. Por ello, al principio del año, implementamos un ciclo de talleres para madres y padres de Maternal y durante el ciclo escolar realizamos asambleas con delegados para afianzar el clima de contención, fortalecer el conocimiento mutuo, la confianza y escucharnos.

Los preparativos previos al inicio de clases implican pensar y compartir estrategias para que estos primeros encuentros con los niños, sus familias, maestras, psicólogas y psicomotricistas se conviertan en momentos significativos. Estos encuentros se desarrollan, con mayor frecuencia, en el período de inicio, durante las entradas progresivas. En este tiempo, se conversa sobre el qué y el cómo de la tarea de enseñar en el Jardín Maternal, se explicita que cada acción de cuidado hacia el niño es una acción pedagógica que resignifica rasgos de la crianza familiar. 

A su vez, los talleres con las psicólogas o psicomotricistas son espacios de reflexión entre madres y padres ―para mirarse, escucharse y escuchar― en el que cada uno puede expresar cómo está viviendo el proceso de integración de su hijo al Maternal. Estos espacios son esenciales para comprender el punto de vista del otro, identificarse o no, y para entender la diversidad de las familias.

Es por ello que el equipo del Maternal se prepara, a partir de la segunda semana de febrero, para tener entrevistas familiares y conocer la vida personal de las niñas y los niños que ingresarán. Se planifica la primera reunión de madres y padres estratégicamente para brindar información, compartir modalidades de trabajo y escuchar las inquietudes y expectativas de las familias.

También se organiza el período de inicio y se planifican las actividades para los primeros días, considerando los aspectos a abordar, así como la presencia de las familias en la sala de clase. 

Durante el año, el equipo de Maternal ―integrado por las docentes de español y de inglés, auxiliares docentes, maestras y auxiliar de apoyo, psicólogas, psicomotricistas y equipo director― acompaña y sostiene las distintas etapas que transitan niños y familias. Celebramos las certezas y desafíos de los nuevos comienzos a través de los diferentes acontecimientos de la vida de la escuela. Para todo esto se requiere de un clima sereno, buena disposición, escucha y constante apertura a los cambios y los ingredientes fundamentales de confianza y construcción de lazos de afecto.

Ser parte del equipo de Maternal requiere de disponibilidad afectiva y física. Cada integrante del equipo apoya, acompaña, sostiene, valida y nomina las necesidades emocionales, físicas y cognitivas de los niños.

Laura Pitluk es profesora en Ciencias de la Educación egresada de la UBA (Universidad de Buenos Aires); es especialista en nivel Inicial, capacitadora y coordinadora de diversos cursos y encuentros educativos en toda Argentina. También ha sido expositora en diversos congresos, conferencias y encuentros educativos.

 Créditos de imágenes: Centro de Recursos para el Aprendizaje