Inicial

El Jardín Maternal (1 y 2 años) merece un especial cuidado debido a las edades de los niños y la necesidad de construir y afianzar vínculos con estos y sus familias. Por ello, el período de inicio es tan significativo. Comienza tempranamente, cuando la familia se acerca a la Institución para informarse de la propuesta, y se afianza con la entrevista inicial con la psicóloga, después la entrevista con los docentes y continúa con el ingreso de padres y niños a las salas. Es un momento de sentimientos encontrados, de mucha ansiedad. Es una etapa de construcción de códigos compartidos, de concertación de acuerdos y es la iniciación de un recorrido que marcará el camino del año.

El período de inicio involucra a diferentes actores: en especial los niños, las familias, los docentes y se extiende a todo el personal. «Tenemos la responsabilidad de construir propuestas que faciliten a las familias la confianza en sí mismos y en la Institución. Como equipo docente, siempre estamos pensando en qué y cómo hacer para que el ingreso y la integración a la vida institucional se constituya en un momento de aprendizaje cargado de sentido y significación», explicó la Mtra. Laura Molina, subdirectora de Educación Inicial.

En este marco, los talleres en Maternal y en Nivel 3 ―que tienen lugar cuando los padres ya se retiran de la sala y dejan a su hijo en compañía de las maestras y los demás niños― brindan la posibilidad de canalizar la ansiedad que lo nuevo por conocer provoca en las familias y les permite, además, poder expresar lo que sienten, compartir experiencias. En estos talleres, Colegio y familia construyen conjuntamente las condiciones que posibilitan acordar criterios y pautas para una iniciación e integración saludables que posteriormente guiarán el desarrollo del año lectivo.

«Desde hace más de veinte años trabajamos con la modalidad de talleres», explicaron las psicólogas Gabriela Sanguinetti y Adriana Torres. «Muchas veces, esta es la primera salida del niño del hogar y eso genera mucha expectativa. Toda la familia se adapta a la nueva situación, los nuevos horarios y a nuevas personas que son ajenas a la familia».

Los talleres a cargo del equipo de psicólogas de Educación Inicial tienen varios propósitos: abrir las puertas de la Institución, dar a conocer a quienes acompañan diariamente a los pequeños ―más allá de las maestras―, además de brindar a los padres una oportunidad para conocerse y reflexionar acerca del particular momento que están viviendo. «El período de inicio consta de dos momentos. El primero, con el niño y su referente en sala y el segundo, con el niño en el aula junto a sus docentes y pares, y el adulto invitado a participar de talleres», comentó la psicóloga Gabriela Sanguinetti.

En las diferentes instancias planificadas ―para cada grupo desde nivel 1 a nivel 3― desde la Institución se busca «cuidar a los padres que están viviendo un proceso de adaptación similar al que viven los niños. Se procura que reflexionen acerca de cómo se sienten y cómo ven a sus hijos. Hay situaciones de crisis y eso es natural. Es un proceso que demanda tiempo y que se enriquece con las experiencias que cada adulto aporta», expresó la Lic. Torres.

Cada taller se desarrolla en una hora aproximadamente y comienza con «un primer momento de caldeamiento para romper el hielo y conocerse. Se hace a través de un juego o una presentación para que los padres se conozcan entre sí. Este año, además, algunos de los talleres se realizaron en la Sala de Psicomotricidad con una dinámica que terminó con un trabajo en conjunto con los niños», agregaron las psicólogas. «Hemos ido variando. En otras oportunidades hemos hecho los talleres con los profesores de música o con la maestra a cargo de la Biblioteca. La dinámica del taller permite a los adultos compartir un espacio pensado para ellos, más allá del encuentro informal en el patio. La experiencia de tantos años de trabajo y los comentarios de quienes han sido parte de estos talleres respaldan un proceso gradual que nos caracteriza».

 

 

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